En nuestro país, hoy las políticas educativas para el nivel
superior plantean la necesidad del Acompañamiento a las Trayectorias de los
estudiantes, para fortalecer estrategias que apunten a la retención,
permanencia y graduación. En este contexto, la Facultad de Humanidades y
Ciencias Sociales de la UNaM entre sus políticas de fortalecimiento, propone un
Programa de Acompañamiento a las Trayectorias Formativas que favorezca la
inclusión de los estudiantes a la vida universitaria para disminuir la deserción
estudiantil, constituyéndose la tutoría entre pares una de sus líneas
fundamentales.
Entendemos que en la trayectoria formativa de un estudiante
confluyen todos los aspectos de la vida institucional, por lo cual, desde este
posicionamiento sostenemos que la vida universitaria es una experiencia amplia,
es el escenario donde además de la formación profesional, se construye la vida
en comunidad, la ciudadanía. Desde esta concepción, la trayectoria formativa es
una trama dinámica en la cual existe un cruce de trayectorias y se aleja así de
la idea de carrera como un itinerario lineal e individual.
Consideramos necesario fomentar espacios de integración en
forma sistemática, “construir puentes” entre actores institucionales para sortear el problema de la fragmentación,
promover espacios de diálogo, la tarea colaborativa, los proyectos
compartidos. En estos espacios se busca
reconocer aquellas prácticas (algunas visibles y otras no tanto) que tienden a
favorecer la inclusión de los estudiantes. Se trata de trabajar desde el
reconocimiento del otro y de prácticas integrativas que puedan articularse en
una propuesta común.
En una primera etapa estamos trabajando para fortalecer la
biografía con la que ingresan los estudiantes y el reconocimiento de ese otro
diferente a mí pero igual en derechos, por ello trabajaremos básicamente dos
ejes: La autoría de la palabra y el pensamiento emancipador, como un modo de
afrontar los avatares propios de la vida universitaria en particular y la vida
social en general y, la otredad, desde distintas expresiones artísticas.
La autoría de la palabra, se internaliza como sostén
subjetivo a lo largo del proceso de construcción del lenguaje. El estudiante
universitario adquiere nuevas estrategias comunicativas que intervienen en sus
modos de pensar y de actuar en el mundo. A su vez, resignifica su “narrar” conquistando un nuevo lugar para su palabra e
historia.
Es así que en el ciclo de talleres de Otredades se propone
busca trabajar con estudiantes el fortalecimiento de su identidad, en el
encuentro con el otro. Si se acepta la diversidad de las miradas y la
incertidumbre de los destinos, se puede construir un paso hacia adelante sobre
los acuerdos firmes de hoy. La clave está en los acuerdos y para ello tiene que
consultarse la mirada de varios.
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