Primer Taller de Tutores Pares 2016
El jueves 18 de Febrero se realizó el primer taller con vistas al Ingreso 2016 de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales.
Estuvieron presentes Tutores que participaron de los cursos y talleres del año anterior y nuevos, inscriptos por una convocatoria abierta de manera on line.
Fue una jornada intensa donde en un primer momento, luego de la presentación del programa y de
contar a los tutores pares novatos lo que se vino trabajando en la
capacitación del 2015 de los tutores pares más experimentados se
procedió a trabajar en taller.
En el segundo momento del
taller se comenzó a trabajar con la carta de bienvenida que será puesta a
andar en el ingreso. Como la complejidad de la lectura no se agota en
la significación del texto lingüístico surgieron múltiples opiniones,
sugerencias que surgieron del mundo personal, de la intimidad de los
vínculos, del mundo político, social, laboral, económico, etc.
El
taller comenzó a transformarse en un concierto de enunciados en busca
de una propuesta amigable para quienes ingresarán a la vida
universitaria en este 2016.
Las lecturas de los cuerpos, las voces, del
paisaje, de los orígenes, son experiencias de vidas que se sumaron a la
mejora de la estructura de la carta.
Se sumaron opiniones, ideas y conjeturas de ese momento donde se pondría en acción el texto:
·
Martín- Poner en valor el Cuadernillo del Ingresante,
tener estrategias para conversar con el compañero.
·
Natalia – el acompañamiento no tiene que ver siempre
con cuestiones académicas.
·
Cintia – No solo en el ingreso se acompaña, también en
el transcurso de la carrera.
·
Sergio – ¿se priorizan las demandas iniciales?
·
Nicolás – unir a los futuros estudiantes de la misma
carrera.
·
Mariela – cambios de ideas sobre las carreras.
·
Cintia – puede darles miedo a pedir permiso para salir, ir al baño.
Animarlos a hacer preguntas!!
¿Es posible leer y ser
sumiso? La lectura podría trasladar una frontera (y no solo traspasarle),
podría desordenar el límite, subvertirlo. Los lectores no obedecen. Lo
que hacen es preguntar, buscar respuestas, contestar, huir, callar...
De
esta manera, en construcción colectiva, se reescribió la carta del
ingreso, entendiendo que leer puede ser el camino para abrirnos al otro,
y también para volver a nosotros mismos.
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